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El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, y la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, protagonizaron un tenso intercambio durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados. Millán acusó al Ejecutivo de contradecirse en sus políticas, especialmente en relación con las cesiones al separatismo y la gestión de la inmigración. La portavoz de Vox afirmó que el Gobierno ha puesto "las instituciones de todos los españoles al servicio del interés personal de la familia de Sánchez" y criticó el reciente pacto para traspasar competencias en inmigración a Cataluña. En respuesta, Bolaños defendió la coherencia del Gobierno, destacando el crecimiento económico de España, que "multiplica por cuatro la media de crecimiento económico en Europa", junto con medidas sociales como el aumento de pensiones y del salario mínimo. El ministro también instó a Millán a respetar las instituciones democráticas y la voluntad de los votantes. El intercambio alcanzó su punto álgido cuando Bolaños acusó a Vox de tener "un cacao considerable con el funcionamiento de un estado de derecho" y de "obedecer y reportar a millonarios extranjeros". Concluyó su intervención con una dura crítica: "Qué pena que la ultraderecha envuelta todo el día en la bandera española haya abandonado por completo a los ciudadanos españoles".