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Cientos de manifestantes frente a un concesionario de Tesla en Brooklyn, Nueva York, mostraban este sábado 29 de marzo carteles llamando nazi a Elon Musk, el dueño de la compañía de movilidad eléctrica y piden continuar con el boicot al fabricante de automóviles eléctricos exigiendo al milmillonario que abandone su papel «no electo» en la administración Trump. La protesta «Tesla Takedown» en el barrio Gowanus de Brooklyn fue una de los cientos de manifestaciones similares en los concesionarios de Tesla de todo el país. Un movimiento de protesta contra Tesla y Musk, su multimillonario CEO, ha sido impulsado por sus recortes como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental, o DOGE, del presidente estadounidense Donald Trump. Ruby Jennino, de 11 años, acudió a la protesta con sus padres y dijo que la administración Trump tiene en el punto de mira a cualquiera «incluso ligeramente diferente». «Nunca sabré por qué alguien le apoyaría», dijo sobre Musk, añadiendo que el Cybertruck de Tesla está mal hecho y es una “estafa”. Trump designó a Musk para dirigir un grupo de trabajo denominado Departamento de Eficiencia Gubernamental, que hasta ahora ha supervisado recortes de más de 100.000 puestos de trabajo en una plantilla civil federal de más de 2 millones de personas. El DOGE también ha impulsado la congelación de la ayuda exterior y la cancelación de miles de programas y contratos. Además de los llamamientos al boicot en Estados Unidos, algunos canadienses han prometido no comprar productos estadounidenses tras la subida de aranceles a productos canadienses por parte de la administración Trump. En las semanas previas a las protestas, los automovilistas han intercambiado un número récord de vehículos eléctricos Tesla este mes, según mostraron los datos de Edmunds. Las acciones de Tesla, que se dispararon tras la elección de Trump, se han reducido casi a la mitad desde su máximo de enero.

-Redacción-