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Cuenta atrás en la compañía espacial de Elon Musk para el lanzamiento del Starship, el cohete más potente jamás construido. Un espectáculo grandioso en directo por la red social del multimillonario. Impecable despegue del gigante en su séptima prueba y en solo dos minutos y 40 segundos la nave se separa así del propulsor. Aplausos que acompañan también esta increíble maniobra de descenso a Tierra del propulsor atrapado con absoluta precisión. Pero la nave, un minuto y medio después, explota sin tripulación, a 146 kilómetros de altitud, y la lluvia de restos incandescentes provoca el desvío de aviones. Lejos de asumirlo como un fracaso, Elon Musk ha escrito en X: "El éxito es incierto, pero el entretenimiento está garantizado". Mientras su compañía Space X se aferra a la idea de que el éxito depende de lo que se aprende y este lanzamiento ayudará a mejorar la fiabilidad de la nave espacial. La causa de la explosión del cohete ha sido un incendio provocado por una fuga. Elon Musk calcula que en un mes tendrá un nuevo cohete mejorado con un sistema antiincendios. Preparado para otro ambicioso lanzamiento al espacio. 

-Redacción-