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Toneladas de plástico se acumulan en la presa de Ruzizi, en Congo, y no sin consecuencias: los residuos se filtran y se acumulan bloqueando las turbinas de la central hidroeléctrica. lo que provoca cortes de luz frecuentes. Sólo es un ejemplo de los efectos de la mala gestión de este tipo de residuos. En los países más pobres sólo se recicla el 4% de los desechos de plástico, pero además ellos también reciben de muchos países ricos la basura de plástico que ya es un problema global, presente en el agua en forma de micropartículas que acaban en nuestro organismo. El objetivo de la cumbre de Busán, en Corea del Sur, es empezar a atajar este problema, con el reto de lograr un acuerdo para reducir hasta el cero por ciento la fabricación mundial de plásticos para 2040. Además se busca aumentar las tasas de reciclaje, que actualmente apenas alcanza el nueve por ciento de media en el mundo. Y la idea es que se apruebe un tratado jurídicamente vinculante. Actualmente se producen en todo el mundo más de 400 millones de toneladas de plásticos al año y lejos de reducirse, las proyecciones de las empresas fabricantes van a más. Así se estima que para dentro de unos 35 años se podría duplicar esa cantidad, para entonces ya habrá más plástico en el mar que peces.

-Redacción-